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fuente: Captura rpp

Gracias Popy, el Perú y la historia te lo agradecen

Olivera le dio la estocada final a un ciclo de aprismo que no nos condujo a nada como país

Wilfredo Chacón

Publicado: 2016-04-04

El domingo 03 de abril del 2016 quedará en la memoria de algunos peruanos como un día memorable. Semanas antes, la sombra de un Fernando Olivera, antiguo abanderado de la lucha contra la corrupción, se paseaba por algunos canales de televisión escoba en mano como una suerte de caricatura de lo que representa un candidato presidencial.

Nadie pensó que este candidato, semanas después, sería el que reivindique la memoria de un sector del pueblo peruano, un sector que tiene claro que Alan García y su partido encarnan la figura de la corrupción, el tráfico de influencias, la relación entre el narcotráfico y el Estado, el abuso del poder y la burla de las instituciones. 

Podrán decir que su participación no se centró en dar a conocer sus propuestas, que lo que hizo fue un espectáculo que iba más allá de lo que el debate exigía, que no estuvo a la "altura" de un aspirante a la presidencia; con toda seguridad los que lo afirmen tienen razón. Sin embargo, les guste o no, Popy Olivera fue el único que puedo decirle a García en vivo y ante millones de peruanos, lo que representa su candidatura. O es que alguien puede negar que Alan García es lo suficientemente sinvergüenza para prometer imprescriptibilidad de delitos después de vivir en París mientras sus delitos prescribían; acaso alguien puede negar que la inflación en su primer gobierno nos dejó en la banca rota y a merced del fujimorismo al cual nos entregó para que hiciera lo que hizo con el país; acaso alguien puede negar que Alan García indultó narcotraficantes a cambio de dinero; acaso alguien puede negar que Alan García tuvo responsabilidad en el baguazo, porque los pueblos indígenas no le merecían respeto pues los considera ciudadanos de segunda clase. 

Olivera ayer no lanzó injurias, Olivera no es ese insecto molestoso que se ignora como dijo Mulder en posterior entrevista, estoy seguro de que ningún aprista ignoró a Olivera ayer, Olivera le dio la estocada final a un ciclo de aprismo que no nos condujo a nada como país; un aprismo que nos presentó a los Fujimori y nos sembró al fujimorismo como partido y forma de hacer política; un aprismo que volvió 21 años después de dejarnos en la ruina y se reeligió para vendernos el cuento del crecimiento, crecimiento que dejaron pasar por una suerte de mezcla entre mediocridad y falta de capacidad y que nos hubiera podido servir para mejorar en educación y reducir la pobreza; un aprismo cuyo "mayor mérito" fue crear redes de corrupción y poder dentro del Poder Judicial; un aprismo que considera que existen ciudadanos de segunda clase; un aprismo que reinvindica una de las forma más bajas de hacer política; ese aprismo ayer recibió un knock out que lo deja agonizante y lo obliga a cambiar, porque ese aprismo hace tiempo que no es un partido político, es un caudillaje más, enmascarado en algo que alguna vez fue un partido político.


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